En el mes de mayo, mi amigo el pintor, grabador y diseñador alemán, Hermann Waldenburg y su esposa Marianne, se acercaron por Zaragoza para volver a vernos durante su último viaje a España. Hermann Vogt, nació en 1940 en la ciudad alemana de Waldenburg, en la región de Silesia. Tras estudiar arte en Berlín y durante una beca en México y Centroamérica, se detuvo en Costa Rica, – hablamos, de 1963-64, – trabajando como artista en el país y exponiendo en el Museo Nacional en una colectiva. Para esas fechas yo iniciaba mi carrera artística como pintor y grabador, exponiendo en colectivas con el Grupo Totem. Pero no es hasta el año 1968 en que adopta el nombre de su ciudad natal, Waldenburg, para firmar su obra artística.
En 1969-70 se traslada a Madrid con una beca D.A.A.D. e ingresa en el Taller de Grabado de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, al mismo tiempo que yo ingresaba en dicho taller para hacer la especialización de Grabado calcográfico. Y es allí donde fraguamos la amistad de cuarenta y cinco años que continua hasta hoy. En el taller de San Fernando coincidimos una serie de artistas de muchas nacionalidades y estilos creativos, pero Hermann sobresalía por su gran conocimiento en el dominio del aguatinta y todos aprendimos o perfeccionamos esta técnica viendo trabajar al alemán, que ya para esas fechas era uno de los mejores grabadores en el campo internacional del grabado.
En 1973-74 recibe otra beca para formarse en Roma; lo mismo me sucedió a mí, que la UNESCO me beca para formarme en Roma junto con Teresa Grasa, en el campo de la Restauración de la Pintura Mural. Antes, en 1972 me otorgan una Medalla de oro en la III Bienal Internacional de la Gráfica de Florencia y a Hernmann le otorgan el Premio de la República Federal de Alemania en la misma Bienal del año 1974. Teresa y yo regresamos a España e instalamos un Taller Barboza Grasa de Grabado en Madrid, y Hermann fija su residencia en Berlín. Con motivo de la restauración de la pintura mural de Goya en Aula Dei, 1978-79, nos trasladamos a Zaragoza, tierra de Teresa, y fijamos nuestras vidas en esta ciudad, fundando la Galería de Arte Costa 3 dedicada especialmente a la obra sobre papel tanto grabado como dibujo, y en 1979 invitamos a exponer a Hermann realizándole una exposición el 25 de octubre, siendo un éxito total. En el catálogo Teresa Grasa habla de su obra y dice: La Naturaleza de Hermann Waldenburg:……es sin duda uno de los artistas mas importantes y representativos del momento artístico europeo. Su obra se encuadra dentro de al búsqueda y observación de los fenómenos naturales. La Naturaleza que siente Waldenburg tiene una vitalidad dirigida, las plantas se yerguen o doblegan al mandato de la máquina, los brotes o semillas son perfectos y plenos, pero encuadrados en un espacio preconcebido, fijo y continuo, con lo que se van transformando y creciendo en sí mismos,…..La técnica sobria y sabiamente manejada de Waldenburg acompaña y complementa su lenguaje expresivo. Las aguatintas adquieren valores de transparencia u opacidad según la voluntad del artista, logrando toda una gama de variaciones y degradaciones difícilmente superables……
Angel Azpeitia en su sección Crítica de Arte, el 7 de octubre de 1979, habla sobre esta obra gráfica en Heraldo de Aragón y en su último libro: Exposiciones de arte actual en Zaragoza. Reseñas escogidas 1962-2012. Pág. 305, la dedica a esta exposición en Costa 3. Luego el periodista Juan Dominguez Lasierra escribe un largo artículo en el mismo periódico el martes 9 de octubre, que titula: La ultrarealidad de Hermann Waldenburg. Mas tarde en 1980 colaborando la Galería de Arte Costa 3 con el Instituto Alemán de Madrid, expusimos su obra gráfica en sus salas, estando el artista presente. Nuestra correspondencia es continua, y el 14 de mayo de 1982 se realizó una exposición en Costa 3, que se titulaba: Standpunkte zur Realität – Puntos de vista a la realidad, en la que participaron los siguientes artistas: Berndt, Düerkop, Kürschner, Koeppel, Kriester, Rohloff y Waldenburg. Este grupo trabajaba en Berlín occidental, rodeado por un muro, y lo comenté en la presentación del catálogo:… Hoy no podemos volver la cara a una realidad, sino que tenemos que enfrentarnos conscientemente a este hombre del siglo XX lleno de agresividad y de deseos de guerra; a la vez que sufrimos esa pérdida de identidad con la naturaleza que nos hace perder el eslabón de la ecología y es asi como estos artistas berlineses que sufren la presión de estar rodeados por un muro y se sienten isla dentro del continente, quieren dejar expresados sus mas íntimos sentimientos, como diría Waldenburg de su obra: Busco el aspecto de una formación serial del hombre y de su sociedad técnica y numérica, incluso de la formación serial de toda la naturaleza, a la misma imagen de la cibernética …..
Y precisamente en este retorno de Hermann a Zaragoza, vuelve a salir el tema del muro de Berlín, porque este artista vive la realidad y su entorno y ahora con su cámara fotográfica se vuelve artista del documento fotografiando todos los graffitis realizados por artistas anónimos sobre este vergonzoso muro reuniendo un testimonio único de este arte efímero de las calles que se ha convertido en un libro para acompañar las fotografías que expone en diversas ciudades. Lo titula Mauer Kunst – Graffiti und Objektkunst in Berlin 1989bis 1994. (Arte en el Muro. Graffitis y objetos de arte en Berlín 1989-1994) publicado por la Editorial Nicolai en 2013. Por el interés de estas fotos fuimos a la sede de la Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza y hablamos de este tema y la Junta directiva se mostró muy interesada en presentar esta obra única en Zaragoza y esperamos que pronto volvamos a ver a este artista berlinés ligado a esta ciudad, porque su obra la guardan coleccionistas de aquí, y podamos admirar esta faceta de este gran artista gráfico alemán.
Carlos Barboza Vargas