Había dos grandes aulas con una tarima central y una serie de pupitres dispuestos en circular alrededor de ella donde los alumnos podían dibujar desde muy diversos ángulos así que mientras posaban uno hacia apuntes cambiando de sitio. Para este trabajo utilizamos un papel barato que comprábamos en bloque en la secretaria y los gastábamos rápidamente, los dibujos que consideraba mejores los guardaba, el resto iba al basurero. También utilicé cuadernos con mejor calidad de papel para trabajar las plumillas y el bolígrafo, de estos conservo casi todos. Teresa Grasa que ha hecho el estudio y catalogación de toda mi obra como dibujante para el catálogo de la exposición titulada “Fábrica de Dibujos Barboza 1953-2001” realizada en Zaragoza y dice lo siguiente: La Carpeta azul conserva 125 obras pertenecientes a los años 1968 al 1970, desde los esqueletos completos de anatomía a los estudios de desnudo del Circulo de Bellas Artes y los estudios de cabezas y torsos, todo ello con la técnica de carboncillo y barras de sanguina y sepia manejadas con gran maestría. Continúa dibujando fragmentos corporales realizados a lápiz fino o graso y bolígrafo azul, utilizando papeles grandes de 44 x 32 cm. Esta carpeta se complementa con el Cuaderno nº 2 del Círculo de Bellas Artes en el que prosigue sus estudios de desnudo empleando la plumilla y el bolígrafo azul, en papel más pequeño de tamaño y un numero de 28 obras.
El ambiente artístico era muy bueno y además para incentivar la práctica del dibujo cada mes se hacía un concurso de los dibujos realizados que se exponían en las paredes de la recepción y cada uno presentaba dos piezas, yo en el mes de enero de 1969 presenté mis trabajos los cuales fueron premiados. La prensa como el diario Informaciones dio la noticia de este concurso de esta forma: “Premio del Círculo de Bellas Artes. Los premios de dibujo de los estudios del Círculo de Bellas Artes correspondientes al mes de enero han sido concedidos a don Luis María Yñiguez y don Carlos Enrique Barboza. El jurado estaba integrado por los señores Leonardo Martínez Bueno, Emilio Marín y Angel Ballestero Sierra. También La Nación de Costa Rica publicó la noticia de este premio. Al final de curso se hacia una exposición en la Sala Minerva del Círculo, donde se exponían los mejores trabajos realizados durante el año, aquí también premiaban los dibujos y en esta ocasión me otorgaron el 2º Premio Fin de Curso de 1969, así lo certifica D. Alfonso Sánchez Colomina, Vocal de clase, el 7 de julio de 1969 y dice: Que D. Carlos Enrique Barboza Vargas ha obtenido el 2º Premio de Dibujo, en la Exposición de Fin de Curso en este Círculo….
La relación entre los artistas que acudían a dibujar era de compañerismo, había una mezcla de artistas jóvenes, pintores que comenzaban a destacar y aficionados a las bellas artes; se encontraban artistas como Antonio López, Alcorlo, Marcoida, Daniel Merino, y Toral, cuando se vestía de astronauta. También hice muy buenos amigos con los que conservo todavía la amistad, como son el escultor Enrique Cabildo, Javier García del Olmo, gran dibujante, grafista y coleccionista de materiales y libros caligráficos junto a su mujer Esther Vilas; en 1976 nos diseñó Javier el libro Aurelio Grasa, 1873-1972, primera monografía sobre la obra gráfica del fotógrafo aragonés, pionero del reporterismo gráfico y gran paisajista del Pirineo. El magnífico dibujante, grabador y pintor que es Andrés Barajas, el japonés Mitsuo Miura, quien era compañero también en la Escuela de San Fernando y la pintora y luego galerista, María Jesús Ylardia, que regentó mas tarde la Galería Columela, propiedad de Agustín Rodriguez Sahagún, luego Alcalde de Madrid y promotor de la Escuela de París. Años mas tarde, expusieron en nuestra Galeria de Arte Costa 3. Miura expuso en 1981 obra gráfica con su visión de artista japones que le ha dado gran prestigio. Andrés Barajas también expuso eb 1983 obra gráfica con carpetas de carácter surrealista y Cabildo expuso en 1985 esculturas en mármol y madera en las que la luz y la forma jugaban entre los espacios. Las modelos Trini y Conchita, Teo Mieres, hermana del pintor Mieres de Asturias y mi amigo Zapata, gallego, que vivía en mi misma Pensión Leonesa, y que en uno de los viajes a su tierra falleció, desde aquí un recuerdo, guardo unos retratos que le hice en el Círculo. Y después de dibujar hasta las diez de la noche nos íbamos en grupo a tomar unos vinos a las tascas que se encontraban desde Círculo hasta la Plaza Mayor, combinando el vino con patatas bravas, huevos duros, tortilla de patatas, gambas, calamares y toda la gama de tapas que se encuentran por Madrid, llegando a la Pensión con Arroyo y Zapata, cenados y con sueño suficiente para descansar y así al día siguiente continuar aprendiendo y disfrutando del arte y la amistad.